La hostelería española tardará mucho tiempo en recuperarse de los estragos del COVID-19. Según el Anuario de la Hostelería 2020, de Hostelería de España, este sector no recuperará los datos de 2019 hasta finales de 2021 o principios de 2022. Y siempre, en el mejor de los escenarios.
Este documento muestra también que, en 2019, la hostelería española se mantuvo por encima de los 315.000 establecimientos. Todos ellos emplearon 1,7 millones de trabajadores y facturaron 129.341 millones de euros. Estos datos reflejan un 6,2% del PIB.
En cuanto a la tipología de establecimientos, los bares son los establecimientos más numerosos (57%), aunque con un descenso permanente. Sin embargo, su producción aumentó un 2%. En total se ingresaron 37.000 millones de euros. A continuación se encuentran los restaurantes, con 81.000 establecimientos el pasado año.
Y en relación con los trabajadores, la media respecto a la población ocupada llegó al 8,7% en 2019. La mayor parte del empleo corresponde a la restauración (76,2%).
Pero el presente y el futuro no es halagüeño. La situación de pandemia provocará, según el Anuario, un descenso de la facturación respecto al año anterior superior al 50%. Las pérdidas que podrían rondar los 67.000 millones de euros. Asimismo, prevé una pérdida de empleo de entre 900.000 y 1,1 millones de puestos de trabajo directos e indirectos.
